Hoy, iniciando el cuarto mes del año 2020, año al que le apuntábamos con acciones sorprendentes y poderosos resultados, y sin duda que ha venido con sorpresas y situaciones inesperadas; enfrentamos una crisis social y económica declarada por OMS como pandemia, la cual trajo como consecuencia el aislamiento preventivo, la cuarentena obligatoria y varios decretos emitidos por los gobiernos de cada país para “prevenir” la propagación del virus y evitar la muerte de muchas personas.
Creo que ya todos estamos bastante informados de las cifras y los indicadores que lleva esta pandemia, pero en medio de toda esta información o infoxicación (exceso de información), me surge una duda:
Creemos que el reto es no ser contagiados del virus, y para eso cumplimos con todas las medidas de prevención y nos hemos quedado en casa todo el tiempo necesario. Sin embargo, para mí, como para muchas personas, emprendedores y empresarios, el reto radica en auto liderarse en medio de la situación, permitirse identificar nuevas posibilidades para ser productivos, salir de lo tradicional y pasar a lo estratégico, explorar nuevas maneras de accionar y adaptarse a la transformación que sí o sí es un condicionante para este 2020.
Las habilidades que conocemos son apenas la base, partimos de ellas para potencializarlas y hacer cosas que aún no sabemos que sabemos hacer, de esta manera alcanzar esos resultados extraordinarios que no veíamos tan cerca en medio del humo espeso y oscuro emitido por la crisis.